
Es posible que solo uses Facebook para ver videos graciosos de gatos, pero los ladrones lo usan para robar tu dinero e información.
Una buena dosis de escepticismo
Facebook puede ser un lugar maravilloso lleno de oportunidades para aprender cosas nuevas, compartir los momentos especiales de tu vida y reconectarte con viejos amigos. Si bien Facebook es un sitio alegre para compartir, dar me gusta y comentar, también es uno de los lugares más comunes para estafas y fraudes en Internet. Desafortunadamente, mientras comparte su vida con amigos y familiares, es posible que sin querer comparta información privada con aquellos que desean hacerle daño.
En el lado positivo, hay formas de protegerse contra las estafas nefastas y, a veces, bastante creíbles. Cada día se exponen más y más estafas y cada nueva estafa es más inteligente y menos detectable que la anterior. Como regla general, recuerde hacer su propia investigación, nunca haga clic en enlaces sospechosos y desconfíe de los sitios que le piden que ingrese información personal. Puedes protegerte de las nuevas estafas de Facebook Messenger y estar atento a estas tácticas comunes.

Información y súplicas de COVID-19
Si bien muchos pensarían que aprovechar una pandemia mundial es demasiado deplorable para imaginar, los estafadores no están por encima de explotar un punto débil tan novedoso. Una estafa popular relacionada con el COVID-19 se presenta en forma de mensajes de un amigo de Facebook que supuestamente quedó varado, infectado o afectado por el virus y necesita algún tipo de apoyo financiero. Estas súplicas a menudo se envían desde cuentas de imitación (con fotos reales e información robada) que desaparecen por completo una vez que se transfiere el dinero. Otros estafadores se hacen pasar por organizaciones de salud u hospitales que solicitan datos personales u ofrecen «curas o vacunas milagrosas» a costos increíblemente bajos. Los piratas informáticos se aprovechan del miedo y la información errónea que rodea al virus e intentan capitalizarlo. Asegúrese de verificar las cuentas, los sitios web y las organizaciones a través de otros canales o fuentes antes de enviar dinero, hacer clic en enlaces o compartir información de identificación. Además, esté atento a errores tipográficos extraños o palabras que indiquen que es posible que el estafador no sea realmente quien dice ser. Consulte más información sobre las estafas relacionadas con el COVID-19 y cómo evitarlas.